Cómo consumir grasas cuando se tiene cáncer

Llevar una dieta saludable es una parte importante del tratamiento del cáncer. Llevar una dieta baja en grasas puede ayudarle a mantener un peso saludable, reducir el riesgo de algunos tipos de cáncer y mejorar su salud general.

A continuación se ofrecen algunos consejos sobre cómo reducir el consumo de grasas cuando se tiene cáncer:

1. Elija proteínas magras. Las proteínas magras, como el pescado, el pollo y el tofu, tienen menos grasa que las carnes rojas.

2. Quita la grasa de la carne. Cuando cocines carne, retira la grasa visible.

3. Hornea, asa o asa tus alimentos en lugar de freírlos. Freír añade grasa innecesaria a la comida.

4. Utilice aceites de cocina saludables. Utilice aceite de oliva, aceite de canola o aceite de aguacate en lugar de mantequilla o manteca de cerdo.

5. Limita la ingesta de alimentos procesados. Los alimentos procesados ​​suelen tener un alto contenido de grasas no saludables, como grasas saturadas y grasas trans.

6. Elija cereales integrales en lugar de cereales refinados. Los cereales integrales son más ricos en fibra y nutrientes que los cereales refinados y pueden ayudarle a sentirse satisfecho por más tiempo.

7. Coma muchas frutas y verduras. Las frutas y verduras son bajas en grasas y calorías y están repletas de vitaminas, minerales y fibra.

8. Limita la ingesta de grasas no saludables. Las grasas no saludables, como las grasas saturadas y las grasas trans, pueden aumentar el riesgo de cáncer y otros problemas de salud.

9. Hable con su médico o dietista registrado. Pueden brindarle consejos personalizados sobre cómo reducir la ingesta de grasas cuando tiene cáncer.

Si sigue estos consejos, podrá reducir su consumo de grasas y mejorar su salud general. Esto puede ayudarle a sentirse mejor y reducir su riesgo de desarrollar cáncer u otros problemas de salud.