¿Qué significa si no deja de dolerte la garganta?

El dolor de garganta persistente, también conocido como dolor de garganta crónico, puede tener varias causas subyacentes y requiere una evaluación médica adecuada. Aquí hay algunas posibles razones por las que es posible que su garganta no deje de doler:

1. Infección bacteriana: Una infección bacteriana, como la faringitis estreptocócica o la amigdalitis, puede provocar un dolor de garganta intenso y persistente. Estas infecciones requieren antibióticos recetados por un médico.

2. Infección viral: Las infecciones virales, como el resfriado común o la influenza, también pueden provocar dolor de garganta que puede durar varios días. El reposo y los medicamentos de venta libre generalmente pueden ayudar a aliviar los síntomas.

3. Alergias: Las alergias al polen, el polvo o la caspa de las mascotas pueden causar irritación e inflamación de la garganta, lo que provoca un dolor de garganta prolongado. Es posible que se necesiten medicamentos para las alergias o inmunoterapia para controlar los síntomas.

4. Reflujo ácido: La enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) ocurre cuando el ácido del estómago regresa al esófago, causando irritación e inflamación de la garganta. El dolor de garganta persistente, la ronquera y la sensación de ardor en la garganta son síntomas comunes. Se pueden recomendar modificaciones en el estilo de vida, antiácidos o medicamentos para reducir el reflujo ácido.

5. Goteo posnasal: La producción excesiva de moco en los senos nasales puede drenar hacia la parte posterior de la garganta, provocando irritación y dolor de garganta. Esto puede ser causado por alergias, resfriados u otras afecciones respiratorias. Manejar la causa subyacente puede ayudar a aliviar el dolor de garganta.

6. Amigdalitis: La amigdalitis crónica, caracterizada por amígdalas hinchadas e inflamadas, puede causar dolor de garganta persistente. Dependiendo de la gravedad, el tratamiento puede incluir antibióticos, amigdalectomía (extirpación quirúrgica de las amígdalas) u otras terapias.

7. Sequedad: Una garganta seca puede causar irritación y malestar. Esto puede ocurrir debido a deshidratación, exposición al aire seco o ciertos medicamentos. Beber muchos líquidos y usar un humidificador puede ayudar a aliviar el dolor.

8. Cáncer: En casos raros, el dolor de garganta persistente puede ser un síntoma de cáncer de garganta. Es fundamental acudir al médico si el dolor de garganta se acompaña de una pérdida de peso inexplicable, dificultad para tragar o un cambio en la voz.

Es importante consultar a un profesional de la salud si el dolor de garganta persiste durante más de unos pocos días, se acompaña de fiebre, dificultad para tragar u otros síntomas preocupantes. Pueden evaluar la causa subyacente y recomendar el tratamiento adecuado. El autotratamiento del dolor de garganta persistente sin la orientación médica adecuada puede provocar complicaciones y retrasar un tratamiento eficaz.