Un acto humano es un término utilizado en seguros para describir cualquier evento que involucre descuido, error o intención humana que cause pérdida o daño. Ejemplos de tales actos incluyen robo, vandalismo, daño intencional o incluso actos con animales. Sin embargo, un simple acto como estornudar no puede catalogarse como un acto del hombre. Si bien el reflejo de estornudar es parte de nuestra biología humana, no puede interpretarse como intencional o incluso descuidado hasta el punto de ser responsable de las pérdidas en las que incurre.