Las conductas seductoras en los niños no necesariamente indican autismo ni ningún síndrome. Hay muchas razones por las que un niño puede mostrar tales comportamientos y es importante consultar con un profesional calificado para evaluar con precisión el comportamiento del niño y determinar sus causas subyacentes. No se debe asumir automáticamente que los comportamientos seductores en los niños están relacionados con el autismo.