¿Qué es el infarto de tibia distal debido a un traumatismo?
El trauma puede causar daño a los vasos sanguíneos que suministran sangre al hueso, lo que provoca una pérdida del flujo sanguíneo y la posterior muerte ósea. Esto puede ocurrir como resultado de varios tipos de lesiones, como fracturas graves, lesiones por aplastamiento o impactos de alta energía.
Cuando el flujo sanguíneo al hueso se ve comprometido, el tejido óseo comienza a sufrir un proceso de necrosis, donde las células del hueso mueren y la estructura ósea se debilita. Esto puede provocar dolor, hinchazón e inestabilidad en el área afectada, lo que dificulta caminar o soportar peso sobre la pierna afectada.
El tratamiento del infarto del hueso de la tibia distal debido a un traumatismo generalmente implica inmovilización, tratamiento del dolor y tratamiento de cualquier lesión o complicación asociada. En algunos casos, puede ser necesaria una intervención quirúrgica para eliminar el tejido óseo muerto, promover la curación y restaurar la función del área afectada.