¿Por qué el músculo esquelético puede sufrir tétanos?

El músculo esquelético puede sufrir tétanos debido a la suma de contracciones individuales. Cuando se estimula un músculo esquelético, sufre una contracción nerviosa, que es una contracción única y breve seguida de una relajación. Sin embargo, si el estímulo se repite antes de que el músculo tenga la oportunidad de relajarse, las contracciones posteriores se sumarán, dando como resultado una contracción sostenida conocida como tétanos. Este fenómeno se produce debido a la acumulación de iones calcio en las fibras musculares, lo que prolonga la fase de contracción e impide la relajación. El tétanos permite que los músculos esqueléticos mantengan contracciones sostenidas durante períodos prolongados, lo cual es esencial para diversas actividades como sostener objetos, mantener la postura y generar movimientos poderosos.