Si tienes malos gases ¿significa un problema con tu sistema digestivo?
Por ejemplo, es más probable que ciertos alimentos produzcan gases que otros. Estos incluyen frijoles, lentejas, repollo, brócoli y cebolla. Comer demasiado rápido o beber bebidas carbonatadas también puede provocar gases. Y algunas afecciones médicas, como la intolerancia a la lactosa y la enfermedad celíaca, también pueden provocar gases.
Si experimenta gases frecuentes o intensos, es importante consultar a un médico para descartar cualquier afección médica subyacente. Sin embargo, en la mayoría de los casos, los malos gases son simplemente un inconveniente temporal que puede controlarse realizando algunos cambios en su dieta y estilo de vida.