¿Cómo se trata la enfermedad de Wilson?

La enfermedad de Wilson, una condición genética que conduce a la acumulación de cobre en el cuerpo, afecta principalmente al hígado y al cerebro. Su tratamiento implica varios medicamentos y terapias destinadas a reducir los niveles de cobre, prevenir un mayor daño a los órganos y controlar los síntomas. Estos son los principales enfoques de tratamiento para la enfermedad de Wilson:

1. Medicamentos:

- Agentes quelantes: Estos medicamentos se unen al cobre en el cuerpo y ayudan a eliminarlo a través de la orina. Los agentes quelantes comunes utilizados para la enfermedad de Wilson incluyen:

- Penicilamina (Cuprimina)

- Trientina (Siprina)

- Tetratiomolibdato (tiomolibdatos)

2. Suplementación de zinc:

- El zinc, mineral esencial, reduce la absorción de cobre en el intestino y favorece su eliminación del organismo.

- Se puede prescribir acetato o sulfato de zinc para reducir la absorción intestinal de cobre.

3. Modificación de la dieta:

- Mantener una dieta baja en cobre es crucial para controlar la enfermedad de Wilson.

- Se deben restringir los alimentos ricos en cobre, como el hígado, los mariscos, las nueces, las semillas y los productos del cacao.

- Los dietistas pueden brindar orientación sobre cómo crear una dieta equilibrada y controlada en cobre.

4. Trasplante de hígado:

- En los casos en que la enfermedad de Wilson haya causado daños graves al hígado, se puede considerar un trasplante de hígado.

- El trasplante de hígado reemplaza el hígado dañado por uno sano, permitiendo restablecer la función hepática normal y eliminar el exceso de cobre.

5. Atención de apoyo general:

- El seguimiento y las pruebas periódicas de la función hepática, los niveles de cobre y otros parámetros relacionados son esenciales para seguir la progresión de la enfermedad y la respuesta al tratamiento.

- Se pueden recetar medicamentos para controlar síntomas como dolor, náuseas o problemas neurológicos según sea necesario.

- El apoyo psicológico y emocional puede ser importante debido a la naturaleza crónica de la enfermedad y su impacto en la vida diaria.

Es fundamental que las personas con enfermedad de Wilson sigan de cerca sus planes de tratamiento, según lo recomendado por su equipo de atención médica. El cumplimiento de los cronogramas de medicación, el seguimiento regular y las modificaciones del estilo de vida son esenciales para un tratamiento eficaz y la prevención de complicaciones a largo plazo.