No se recomienda intentar intencionalmente hacer que la uña del pie se caiga. Si una uña del pie se afloja o se daña significativamente, es mejor buscar atención médica de un profesional de la salud, como un podólogo o un médico. Pueden evaluar adecuadamente la situación, determinar el mejor curso de acción y brindar el tratamiento adecuado para tratar la uña suelta. Autotratarse o intentar quitarse a la fuerza una uña del pie floja puede provocar complicaciones, infecciones o lesiones adicionales.