¿Cuál es la función del tejido cardíaco?
El tejido cardíaco proporciona la fuerza necesaria para impulsar la sangre desde las cámaras del corazón (aurículas y ventrículos) a través de los vasos sanguíneos. Cuando el corazón se contrae, crea una presión que empuja la sangre fuera del corazón hacia las arterias, que la transportan a varias partes del cuerpo. Cuando el corazón se relaja, permite que la sangre regrese al corazón desde las venas.
La contracción y relajación del tejido cardíaco están reguladas por señales eléctricas generadas por células especializadas dentro del corazón, conocidas como nódulo sinoauricular (SA) y nódulo auriculoventricular (AV). Estas señales eléctricas coordinan el tiempo y la secuencia de las contracciones en las diferentes partes del corazón, asegurando que las cámaras del corazón se contraigan y relajen en el orden adecuado para mantener un flujo continuo de sangre.
En resumen, la función del tejido cardíaco es generar contracciones y relajaciones rítmicas que bombean sangre desde el corazón al resto del cuerpo y de regreso al corazón. Esta acción de bombeo es esencial para transportar oxígeno y nutrientes a todas las células y tejidos del cuerpo y para eliminar los productos de desecho.