¿Cuál es la mejor manera de controlar el sangrado?

Controlar eficazmente el sangrado es crucial en situaciones de emergencia y potencialmente puede salvar vidas. Aquí hay una guía paso a paso sobre la mejor manera de controlar el sangrado:

1. Evalúe la situación:

- Mantenga la calma y evalúe la gravedad del sangrado. Si el sangrado es intenso, busque ayuda médica profesional de inmediato.

2. Utilice guantes:

- Ponte guantes para protegerte de posibles infecciones.

3. Aplique presión directa:

- Utilice un paño limpio, una venda o un apósito esterilizado para aplicar presión directa sobre el área sangrante. Presione firme y continuamente para ayudar a disminuir o detener el sangrado.

4. Eleve el área lesionada:

- Si es posible, elevar la zona lesionada por encima del nivel del corazón. Esto ayuda a reducir el flujo sanguíneo al área lesionada, minimizando el sangrado.

5. Utilice un punto de presión:

- Si la presión directa no es efectiva o si el sangrado es intenso, puede intentar aplicar presión en un punto de presión. Estos son puntos específicos del cuerpo donde presionar puede ayudar a controlar el sangrado.

6. Utilice un torniquete (solo como último recurso):

- Sólo se debe utilizar un torniquete como último recurso si el sangrado es intenso y no puede controlarse con otros métodos.

- Aplique el torniquete de 2 a 3 pulgadas (5 a 8 cm) por encima del lugar del sangrado. Apriete el torniquete hasta el punto en que se detenga el sangrado.

- Recuerde que un torniquete puede causar complicaciones graves y sólo debe usarse por un período corto (menos de 30 minutos) mientras se espera asistencia médica profesional.

7. Cubrir la herida:

- Una vez que el sangrado esté bajo control, cubra la herida con un vendaje o apósito limpio para protegerla de infecciones y lesiones mayores.

8. Busque ayuda médica:

- Incluso si el sangrado parece haberse detenido, es importante buscar atención médica profesional lo antes posible. Un proveedor de atención médica puede limpiar adecuadamente la herida, evaluar su profundidad y brindar tratamiento adicional según sea necesario.

9. Quédese con la persona:

- Si está ayudando a alguien que está sangrando, quédese con él y continúe controlando el sangrado hasta que llegue ayuda médica. Tranquilízalos y trata de mantenerlos tranquilos.

10. Aprenda primeros auxilios básicos:

- Considere tomar un curso básico de primeros auxilios para aprender técnicas de control de hemorragias y otras habilidades esenciales de primeros auxilios que podrían resultar invaluables durante una emergencia.

NOTA:

- Cuando se trata de una lesión sangrante grave, es importante mantenerse concentrado y sereno. Una acción clara y decisiva puede marcar una diferencia significativa hasta que lleguen los profesionales médicos.