No se conoce ninguna relación entre la enfermedad de Charcot-Marie-Tooth tipo 2 (CMT2) y el herpes. CMT2 es un trastorno genético que afecta a los nervios periféricos, provocando debilidad progresiva y atrofia muscular. El herpes, por otro lado, es una infección viral que puede provocar lesiones cutáneas, ampollas y otros síntomas. Si bien ambas afecciones pueden afectar los nervios, no se sabe que tengan ninguna interacción directa o impacto entre sí.