¿Qué causa la presión arterial alta no controlada?

Hay varios factores que pueden contribuir a la presión arterial alta (hipertensión) no controlada. Algunas causas comunes incluyen:

Mala adherencia a la medicación :El incumplimiento de los medicamentos recetados para la presión arterial puede provocar hipertensión no controlada. Es importante seguir constantemente el régimen de medicación prescrito y según las indicaciones de su médico.

Condiciones médicas subyacentes :Ciertas afecciones médicas pueden causar presión arterial alta o dificultar su control, incluidas enfermedades renales, diabetes, apnea del sueño y trastornos de la tiroides. El diagnóstico y tratamiento adecuados de estas afecciones médicas subyacentes son cruciales para un control eficaz de la presión arterial.

Factores de estilos de vida poco saludables :La participación constante en estilos de vida poco saludables, como el consumo excesivo de sal, una dieta rica en grasas y colesterol no saludables, la falta de actividad física, el consumo excesivo de alcohol y el tabaquismo, pueden contribuir a una presión arterial alta no controlada.

Intervenciones no farmacológicas :No realizar las modificaciones necesarias en el estilo de vida, como mantener un peso saludable, seguir una dieta equilibrada, reducir el consumo de sal, practicar actividad física regular, controlar el estrés y limitar el consumo de alcohol, puede contribuir a una presión arterial alta no controlada.

Efectos secundarios de los medicamentos :Algunos medicamentos pueden causar efectos secundarios que conducen a una presión arterial descontrolada, como los medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE), descongestionantes y ciertos esteroides. Es esencial discutir cualquier inquietud sobre los posibles efectos secundarios de los medicamentos con su proveedor de atención médica.

Hipertensión secundaria :Se trata de presión arterial alta causada por una afección médica subyacente, como una enfermedad renal, un tumor en la glándula suprarrenal o un estrechamiento de las arterias de los riñones. La hipertensión secundaria requiere un diagnóstico y tratamiento específicos para abordar la causa subyacente.

Es importante señalar que la presión arterial alta no controlada también puede estar asociada con factores como el estrés, el sueño inadecuado, problemas de salud mental y factores genéticos. El control regular de la presión arterial, la consulta con un profesional de la salud y la realización de las modificaciones necesarias en el estilo de vida son esenciales para controlar eficazmente la hipertensión no controlada.