¿Cuáles son las rutas de infección por MRSA?

Staphylococcus aureus resistente a la meticilina (MRSA) es una bacteria que puede causar infecciones graves. Se transmite por contacto con personas u objetos infectados.

La forma más común de contraer MRSA es a través del contacto directo con una persona infectada. Esto puede ocurrir a través del contacto piel con piel, como dar la mano o abrazarse, o mediante el contacto con los fluidos corporales de una persona infectada, como sangre, saliva u orina.

MRSA también se puede transmitir a través del contacto con objetos o superficies contaminadas. Esto puede incluir artículos como picaportes, muebles, sábanas, toallas o equipo médico.

En algunos casos, MRSA se puede transmitir por el aire. Esto puede suceder cuando una persona infectada tose o estornuda y otra persona inhala las gotitas que contienen la bacteria.

MRSA puede causar una variedad de infecciones, incluidas infecciones de la piel, infecciones de tejidos blandos, infecciones de los huesos e infecciones de la sangre. Estas infecciones pueden ser graves e incluso poner en peligro la vida.

Las personas que tienen un mayor riesgo de contraer MRSA incluyen:

- Personas que están hospitalizadas.

- Personas que tienen un sistema inmunológico debilitado.

- Personas que padecen enfermedades crónicas, como diabetes o enfermedades renales.

- Personas que viven en condiciones de hacinamiento.

- Personas que usan drogas inyectables.

Para ayudar a prevenir el contagio de MRSA, usted puede:

- Lávate las manos frecuentemente con agua y jabón.

- Evite tocarse la cara con las manos sucias

- Mantenga los cortes y llagas limpios y cubiertos

- Evite el contacto con personas infectadas con MRSA.

- Limpiar y desinfectar superficies que puedan estar contaminadas con MRSA.

Si cree que puede tener MRSA, es importante que consulte a su médico de inmediato. El diagnóstico y tratamiento tempranos pueden ayudar a reducir el riesgo de desarrollar complicaciones graves.