No hay una respuesta definitiva a esta pregunta, ya que la investigación sobre los posibles efectos de Ativan en el embarazo es limitada. Algunos estudios han sugerido que Ativan puede aumentar el riesgo de aborto espontáneo, mientras que otros no han encontrado tal riesgo. Un estudio encontró que las mujeres que tomaron Ativan durante el embarazo tenían más probabilidades de sufrir un aborto espontáneo, pero este efecto solo se observó en mujeres que tenían otros factores de riesgo de aborto espontáneo, como fumar o consumir mucho alcohol. Otro estudio no encontró un mayor riesgo de aborto espontáneo asociado con el uso de Ativan durante el embarazo. En general, la evidencia disponible no es concluyente y se necesita más investigación para determinar los riesgos y beneficios potenciales del uso de Ativan durante el embarazo.