¿Puede una ETS causar líquido en el estómago?
1. Enfermedad inflamatoria pélvica (EIP)
La EPI es una infección del útero, las trompas de Falopio y otros órganos reproductivos. Comúnmente es causada por infecciones de transmisión sexual no tratadas, como clamidia y gonorrea. La EPI puede extenderse a la cavidad abdominal y causar inflamación del peritoneo, el revestimiento del abdomen. Esta inflamación puede provocar la acumulación de líquido en el abdomen.
2. Gonorrea
La gonorrea es una infección de transmisión sexual causada por la bacteria Neisseria gonorrea. En las mujeres, la gonorrea puede extenderse desde el cuello uterino a las trompas de Falopio y provocar inflamación del peritoneo. Esta inflamación puede provocar la acumulación de líquido en el abdomen.
3. Clamidia
La clamidia es una infección de transmisión sexual causada por la bacteria Chlamydia trachomatis. En las mujeres, la clamidia puede propagarse desde el cuello uterino hasta las trompas de Falopio y provocar inflamación del peritoneo. Esta inflamación puede provocar la acumulación de líquido en el abdomen.
4. Sífilis
La sífilis es una infección de transmisión sexual causada por la bacteria Treponema pallidum. En la etapa secundaria de la sífilis, que generalmente ocurre entre 2 y 8 semanas después de la infección inicial, una persona puede experimentar una erupción generalizada y síntomas similares a los de la gripe. En algunos casos, la sífilis también puede afectar el hígado y los riñones, provocando la acumulación de líquido en el abdomen.
5. Linfogranuloma venéreo (LGV)
LGV es una infección de transmisión sexual causada por un tipo de bacteria clamidia. El LGV afecta principalmente a los ganglios linfáticos del área de la ingle, pero también puede extenderse a otras partes del cuerpo, incluido el abdomen. En algunos casos, el LGV puede provocar inflamación del peritoneo y acumulación de líquido en el abdomen.
Es importante tener en cuenta que el líquido en el estómago también puede ser causado por otras afecciones médicas, como enfermedades hepáticas, renales, insuficiencia cardíaca y ciertos tipos de cáncer. Si experimenta hinchazón abdominal o cualquier otro síntoma preocupante, es importante consultar a un proveedor de atención médica para una evaluación y tratamiento adecuado.