¿Comer tiza puede causar el problema de los cálculos renales?

Sí, comer tiza puede contribuir a la formación de cálculos renales.

La tiza se compone principalmente de carbonato de calcio. Cuando se consume en exceso, el cuerpo no puede absorber ni utilizar completamente el carbonato de calcio. El exceso de calcio se combina con otras sustancias en la orina, como el oxalato y el fosfato, formando cristales insolubles que eventualmente pueden convertirse en cálculos renales.

Así es como comer tiza puede provocar la formación de cálculos renales:

Aumento del calcio urinario: El consumo de tiza eleva los niveles de calcio en la orina. Los niveles elevados de calcio en la orina promueven la precipitación y cristalización de oxalato de calcio y fosfato de calcio, que son los componentes principales de la mayoría de los cálculos renales.

Niveles reducidos de citrato: El citrato es un inhibidor natural de la formación de cálculos renales. Se une al calcio en la orina impidiendo que cristalice. Comer tiza puede reducir los niveles de citrato en la orina, aumentando aún más el riesgo de formación de cálculos.

Equilibrio de pH alterado: La tiza es alcalina y puede elevar el nivel de pH de la orina. La orina alcalina favorece la formación de determinados tipos de cálculos renales, en particular de cálculos de fosfato cálcico.

Es importante tener en cuenta que, si bien comer tiza puede contribuir a la formación de cálculos renales, no es el único factor. Otros factores como la dieta, la genética, las afecciones médicas subyacentes y la ingesta de líquidos también desempeñan un papel importante en el desarrollo de cálculos renales.

Si tiene antecedentes familiares de cálculos renales o es propenso a formar cálculos, es mejor evitar consumir grandes cantidades de tiza o cualquier otro alimento rico en calcio sin consultar a su médico. Además, mantener una ingesta adecuada de líquidos y seguir una dieta equilibrada es fundamental para prevenir los cálculos renales.