Cómo funcionan los tratamientos para la prevención de la migraña

Los tratamientos de prevención de la migraña funcionan reduciendo la frecuencia, gravedad y duración de los ataques de migraña. También pueden ayudar a mejorar la calidad de vida de las personas con migrañas. Existe una variedad de tratamientos diferentes para la prevención de la migraña disponibles y el mejor tratamiento para una persona en particular dependerá de sus necesidades individuales.

Algunos de los tratamientos de prevención de la migraña más comunes incluyen:

* Medicamentos: Existen varios medicamentos diferentes que se pueden usar para prevenir las migrañas, que incluyen:

* Medicamentos anticonvulsivos, como topiramato (Topamax) y valproato (Depakote)

* Betabloqueantes, como propranolol (Inderal) y metoprolol (Lopressor)

* Bloqueadores de los canales de calcio, como verapamilo (Calan) y nifedipina (Procardia)

* Antidepresivos tricíclicos, como amitriptilina (Elavil) y nortriptilina (Pamelor)

* Inyecciones de Botox: Las inyecciones de Botox se pueden utilizar para prevenir las migrañas en personas que padecen migrañas crónicas (15 o más días de dolor de cabeza al mes). El Botox se inyecta en los músculos alrededor de la cabeza y el cuello y actúa bloqueando la liberación de señales de dolor desde el cerebro.

* Neuromodulación: Los dispositivos de neuromodulación son dispositivos implantados quirúrgicamente que administran estimulación eléctrica al cerebro o la médula espinal. Esta estimulación puede ayudar a reducir la frecuencia y gravedad de los ataques de migraña.

* Cambios de estilo de vida: Hay una serie de cambios en el estilo de vida que las personas con migrañas pueden realizar para ayudar a prevenir los ataques, que incluyen:

* Hacer ejercicio regularmente

* Llevar una dieta saludable

* Dormir lo suficiente

* Manejo del estrés

* Evitar los desencadenantes, como ciertos alimentos, bebidas y condiciones ambientales.

Es importante señalar que los tratamientos de prevención de la migraña no siempre son 100% efectivos. Sin embargo, a menudo pueden reducir significativamente la frecuencia, gravedad y duración de los ataques de migraña y pueden mejorar la calidad de vida de las personas con migrañas.