¿Por qué me duelen y hormiguean los dedos? Son TAN intensos durante algunas semanas a la vez. ¿Solo la mano derecha, el pulgar, otra que me duele más?
1. Síndrome del túnel carpiano :El síndrome del túnel carpiano ocurre cuando el nervio mediano, que va desde el antebrazo hasta la mano, se comprime o pellizca dentro del túnel carpiano, un pasaje estrecho en la muñeca. Esto puede causar dolor, entumecimiento y sensación de hormigueo en los dedos, particularmente en el pulgar, el índice, el medio y la mitad del anular.
2. Dedo en gatillo :El dedo en gatillo, también conocido como tenosinovitis estenosante, ocurre cuando los tendones que controlan el movimiento de los dedos se inflaman e irritan. Esto puede provocar dolor, rigidez y una sensación de bloqueo o atrapamiento en el dedo afectado. El pulgar es el más comúnmente afectado, pero también pueden verse afectados otros dedos.
3. Tendinitis :La tendinitis es la inflamación de los tendones, los cordones fibrosos que conectan los músculos con los huesos. Puede afectar los tendones de los dedos y causar dolor, hinchazón y sensibilidad.
4. Neuropatía periférica :La neuropatía periférica se refiere al daño a los nervios que transportan mensajes desde el cerebro y la médula espinal al resto del cuerpo. Puede causar una variedad de síntomas, que incluyen dolor, entumecimiento, hormigueo y debilidad. Ciertas afecciones, como la diabetes, las deficiencias de vitaminas y los trastornos autoinmunes, pueden provocar neuropatía periférica.
5. Trauma o lesión :Si recientemente ha sufrido una lesión en la mano o los dedos, como un corte, un esguince o una fractura, podría ser la causa del dolor y la sensación de hormigueo.
6. Condiciones médicas :En algunos casos, el dolor y el hormigueo en los dedos pueden estar asociados con afecciones médicas subyacentes como artritis, trastornos autoinmunes o problemas de tiroides.
Si el dolor y el hormigueo persisten o se vuelven intensos, es importante consultar a un médico para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados. Pueden recomendar medidas conservadoras como reposo, hielo, analgésicos y fisioterapia. En algunos casos, puede ser necesaria una cirugía para aliviar la presión sobre el nervio mediano o abordar otros problemas subyacentes.