¿Qué es el dolor perineal posparto?
El dolor puede variar de leve a intenso y puede durar desde unos días hasta varias semanas. A menudo se describe como una sensación de ardor, escozor o dolor. Algunas mujeres también experimentan dolor al orinar o defecar.
Hay una serie de factores que pueden contribuir al dolor perineal posparto, que incluyen:
* Desgarro vaginal o episiotomía: Un desgarro vaginal o episiotomía es un corte que se realiza en el perineo durante el parto para agrandar la abertura de la vagina. Esto puede dañar los nervios y tejidos de la zona y provocar dolor.
* Hinchazón: La hinchazón en la zona perineal es común después del parto. Esto puede ejercer presión sobre los nervios y tejidos y causar dolor.
* Infección: Una infección en la zona perineal también puede provocar dolor.
* Hemorroides: Las hemorroides son venas inflamadas en el recto que pueden ocurrir durante el embarazo y el parto. Pueden provocar dolor y molestias en la zona perineal.
* Espasmos musculares: Los espasmos musculares en los músculos del suelo pélvico también pueden contribuir al dolor perineal posparto.
Hay varias cosas que puede hacer para ayudar a aliviar el dolor perineal posparto, que incluyen:
* Tomar analgésicos. Los analgésicos de venta libre, como el ibuprofeno o el paracetamol, pueden ayudar a aliviar el dolor leve a moderado.
* Aplicar bolsas de hielo. Las bolsas de hielo pueden ayudar a reducir la hinchazón y el dolor. Aplique una bolsa de hielo en el área perineal durante 15 a 20 minutos seguidos, varias veces al día.
* Baños de asiento. Los baños de asiento son baños de agua tibia en los que puedes sentarte para ayudar a aliviar el dolor y la hinchazón. Agregue sal de Epsom o bicarbonato de sodio al agua para ayudar a calmar los tejidos.
* Descanso. El descanso es importante para la curación. Trate de descansar lo más que pueda, especialmente en las primeras semanas después del parto.
* Ejercicios del suelo pélvico. Los ejercicios del suelo pélvico pueden ayudar a fortalecer los músculos del suelo pélvico y reducir el dolor. Hable con su médico o fisioterapeuta sobre qué ejercicios son adecuados para usted.
Si tiene dolor intenso o dolor que no mejora después de algunas semanas, hable con su médico. Es posible que necesite tratamiento adicional, como medicamentos, fisioterapia o cirugía.