La psoriasis no es contagiosa. Es una enfermedad autoinmune crónica que afecta la piel. Puede ser desencadenada por una variedad de factores como el estrés, ciertos medicamentos, la genética y los trastornos del sistema inmunológico. La psoriasis no es causada por bacterias ni virus y no se puede transmitir de persona a persona mediante contacto.