En la mayoría de los casos, la presión arterial alta no causa directamente una erupción. Sin embargo, ciertas afecciones relacionadas con la presión arterial alta, como ciertos medicamentos o la hipertensión crónica, pueden provocar problemas en la piel, incluidas erupciones. Cuando la presión arterial alta coexiste con una afección de la piel, es importante consultar a un médico para determinar la causa subyacente y recibir el tratamiento adecuado.