¿Qué es la espondilitis anquilosante?

Espondilitis anquilosante (EA) Es un tipo de artritis inflamatoria que afecta principalmente a la columna y a las articulaciones sacroilíacas, que son las articulaciones que conectan la columna con la pelvis. Es una afección crónica que puede provocar dolor, rigidez e inflamación en la columna y otras articulaciones, además de otros síntomas. La AS forma parte de un grupo de afecciones conocidas como espondiloartritis.

Síntomas de la espondilitis anquilosante

El síntoma más común de la EA es dolor y rigidez en la zona lumbar y las nalgas. Este dolor puede empeorar por la mañana y mejorar con la actividad. Otros síntomas de AS incluyen:

- Fatiga

- Pérdida de apetito

- Pérdida de peso

- Fiebre

- Dolor y rigidez en las articulaciones del cuello, hombros, caderas y rodillas.

- Dolor e inflamación ocular.

- Dificultad para respirar

- Problemas cardíacos

- Problemas gastrointestinales

Causas de la espondilitis anquilosante

Se desconoce la causa exacta de la EA, pero se cree que está relacionada con un sistema inmunológico hiperactivo y con la genética. La AS es más común en personas que tienen antecedentes familiares de la afección. También es más común en hombres que en mujeres.

Diagnóstico de la espondilitis anquilosante

La EA puede ser difícil de diagnosticar, ya que los síntomas pueden ser similares a los de otras afecciones. El diagnóstico se basa en los síntomas de una persona, el examen físico y las pruebas de imágenes, como radiografías y resonancias magnéticas.

Tratamiento de la espondilitis anquilosante

No existe cura para la EA, pero existen tratamientos que pueden ayudar a aliviar los síntomas y prevenir complicaciones. Los tratamientos para la EA incluyen:

- Medicamentos para reducir la inflamación y el dolor, como medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE), corticosteroides y productos biológicos.

- Fisioterapia para mejorar la flexibilidad y el rango de movimiento.

- Ejercicio para fortalecer los músculos y mejorar la postura.

- Cirugía para corregir deformidades de la columna o aliviar la presión sobre los nervios.

Pronóstico de la espondilitis anquilosante

El pronóstico de la EA varía de persona a persona. Algunas personas pueden tener síntomas leves que pueden controlarse con tratamiento, mientras que otras pueden desarrollar síntomas más graves que pueden provocar discapacidad. El diagnóstico y el tratamiento tempranos pueden ayudar a mejorar el pronóstico de la EA.