¿Qué pasa cuando tus piernas se duermen?

Cuando las piernas "se duermen", se produce una sensación de hormigueo o entumecimiento debido a una pérdida temporal del flujo sanguíneo a los nervios afectados. Esto se conoce comúnmente como parestesia.

Esto es lo que sucede durante este proceso:

1. Compresión de los nervios:cuando se sienta o se acuesta en una posición que ejerce presión sobre ciertos nervios, como el nervio ciático de las piernas, puede provocar compresión.

2. Flujo sanguíneo reducido:como resultado de la compresión, se reduce el suministro de sangre a los nervios y los tejidos circundantes. Este flujo sanguíneo restringido significa que los nervios no reciben suficiente oxígeno y nutrientes.

3. Alteración de la función nerviosa:la falta de oxígeno y nutrientes perjudica el funcionamiento de los nervios. Esto provoca una interrupción en la transmisión de señales entre los nervios y el cerebro.

4. Hormigueo y entumecimiento:la función nerviosa reducida provoca una alteración de la sensación. Inicialmente, es posible que experimente una sensación de hormigueo (hormigueo) a medida que las terminaciones nerviosas comienzan a funcionar mal. Con el tiempo, esto puede progresar hasta convertirse en entumecimiento a medida que los nervios se vuelven más afectados.

5. Restauración del flujo sanguíneo:cuando cambia de posición o alivia la presión sobre los nervios afectados, se restablece el flujo sanguíneo. Esto permite que los nervios recuperen su función normal y el hormigueo o entumecimiento comience a disminuir.

Los síntomas de que las piernas se duerman suelen resolverse en unos pocos minutos o varias horas. Si el entumecimiento u hormigueo persiste durante un período prolongado o se acompaña de otros síntomas como debilidad o dolor, es importante consultar a un profesional de la salud para una evaluación adicional y el tratamiento adecuado.