¿Qué se siente al estar asfixiado?

Ser asfixiado es una experiencia aterradora y angustiosa. Es una sensación que es casi imposible de describir con precisión, pero algunos de los sentimientos más comunes informados por los sobrevivientes de asfixia incluyen:

- Sensación de pánico: La repentina incapacidad para respirar puede causar una intensa sensación de pánico y ansiedad, ya que el cuerpo se acelera tratando de obtener oxígeno.

- Presión intensa: Los sobrevivientes a menudo describen una sensación de presión intensa en el pecho, como si alguien estuviera sentado o parado sobre ellos, lo que dificulta la expansión de sus pulmones y la respiración.

- Pérdida de control: La sensación de asfixia puede ir acompañada de una sensación de impotencia y pérdida de control, ya que se anulan los instintos naturales del cuerpo de respirar.

- Desorientación: La asfixia puede hacer que una persona se sienta desorientada, confundida e incapaz de pensar con claridad, ya que el cerebro pierde oxígeno.

- Miedo a la muerte: En casos extremos, la asfixia puede provocar miedo a la muerte, ya que la persona siente que su cuerpo se apaga y su capacidad de respirar se desvanece.

El impacto emocional y psicológico de la asfixia puede ser duradero, incluso después de que los efectos físicos hayan disminuido, y muchos sobrevivientes experimentan trastorno de estrés postraumático (TEPT) y otros trastornos de ansiedad como resultado de su terrible experiencia.