¿Qué sucede durante una ecografía de tiroides?
Durante el procedimiento, usted se acostará boca arriba con el cuello ligeramente extendido. Se aplicará un gel en el cuello para ayudar a que las ondas de ultrasonido viajen suavemente a través de la piel. Luego, el médico utilizará un pequeño dispositivo portátil llamado transductor para enviar ondas sonoras al cuello. El transductor se moverá sobre su piel y las ondas sonoras rebotarán en la glándula tiroides y crearán imágenes.
Las imágenes se mostrarán en un monitor y el médico las examinará para buscar anomalías, como nódulos, quistes o tumores. El médico también puede medir el tamaño de la glándula tiroides y detectar cualquier signo de inflamación.
Si se encuentra alguna anomalía, el médico puede ordenar más pruebas, como una biopsia, para confirmar el diagnóstico. Una ecografía de tiroides es una forma segura y eficaz de evaluar la glándula tiroides e identificar cualquier problema potencial.