¿Por qué no se utilizan mantas de lana en los quirófanos?
1. Esterilización: Es difícil esterilizar eficazmente las mantas de lana debido a su composición y textura. Las altas temperaturas y los tratamientos químicos necesarios para una correcta esterilización pueden dañar las fibras de la lana, dejándola no estéril. Por el contrario, las mantas sintéticas se esterilizan más fácilmente mediante diversos métodos, como autoclave, vapor y desinfección química.
2. Derramamiento de microfibra: Las mantas de lana arrojan pequeñas microfibras que pueden dispersarse en el aire y depositarse en las superficies del quirófano. Estas microfibras pueden transportar bacterias y contaminantes, lo que representa un riesgo de infecciones en el sitio quirúrgico. Las mantas sintéticas, por otro lado, desprenden menos fibras y es menos probable que contribuyan a la contaminación.
3. Acumulación de pelusa: Las mantas de lana pueden acumular pelusa, lo que puede crear un entorno propicio para que prosperen bacterias y microorganismos. Esto puede aumentar el riesgo de infecciones del sitio quirúrgico. Es menos probable que se acumule pelusa de las mantas sintéticas y se elimina más fácilmente.
4. Regulación del calor: Las mantas de lana son cálidas y aislantes, lo que puede no ser ideal para el ambiente de temperatura controlada que se requiere en los quirófanos. Las mantas sintéticas son más transpirables y permiten una mejor regulación de la temperatura, reduciendo el riesgo de sobrecalentamiento durante los procedimientos quirúrgicos.
5. Inflamabilidad: Las mantas de lana son más inflamables en comparación con las mantas sintéticas hechas de materiales como poliéster o nailon. En un ambiente donde existe riesgo de incendio o descarga electrostática, las mantas sintéticas brindan mayor seguridad.
6. Carga electrostática: Las mantas de lana pueden generar cargas electrostáticas cuando se frotan o se mueven, lo que podría causar molestias o interferencias con los dispositivos médicos. Las mantas sintéticas son menos propensas a la electricidad estática, lo que reduce la posibilidad de que se produzcan tales problemas.
Por todos estos motivos, las mantas de lana no se consideran apropiadas para su uso en quirófanos. En este entorno crítico se prefieren las mantas sintéticas que pueden esterilizarse eficazmente, generan un mínimo de pelusa y proporcionan una mejor regulación de la temperatura y seguridad.