¿Por qué son importantes las lágrimas?
Lubricación: Las lágrimas actúan como un lubricante natural para los ojos, manteniéndolos húmedos y evitando que se sequen. La película lagrimal que cubre la superficie del ojo ayuda a reducir la fricción entre el párpado y el globo ocular, permitiendo un movimiento suave y cómodo de los párpados durante el parpadeo.
Protección: Las lágrimas contienen diversas sustancias antimicrobianas, como anticuerpos, lisozimas y defensinas, que ayudan a proteger los ojos de infecciones causadas por bacterias, virus y hongos presentes en el medio ambiente. Las lágrimas eliminan irritantes como el polvo, los contaminantes y las partículas extrañas, lo que reduce el riesgo de infecciones y lesiones oculares.
Visión clara: Las lágrimas ayudan a mantener una visión clara al suavizar la superficie de la córnea, que es la capa exterior transparente del ojo. Las propiedades ópticas de la película lagrimal ayudan a enfocar la luz correctamente en la retina, asegurando una visión nítida y clara.
Curación de heridas: Las lágrimas promueven la curación en los ojos. Cuando la superficie del ojo se lesiona o daña, las lágrimas proporcionan nutrientes esenciales y factores de crecimiento que facilitan la reparación de los tejidos.
Comodidad: Las lágrimas contribuyen al bienestar general de los ojos. Cuando las lágrimas son insuficientes, los ojos pueden sentirse secos, con picazón, irritación o ardor. La producción adecuada de lágrimas ayuda a mantener la comodidad ocular y previene el dolor.
Regulación emocional: Las lágrimas también desempeñan un papel en la regulación emocional. Derramar lágrimas durante momentos de emociones intensas, como tristeza, pena o alegría, ayuda a aliviar el estrés y promover el bienestar emocional.
Por lo tanto, las lágrimas son esenciales para mantener la salud ocular, proteger los ojos de infecciones e irritantes, permitir una visión clara, ayudar en la curación de heridas, brindar comodidad y contribuir a la regulación emocional. Los controles oculares periódicos pueden ayudar a garantizar que la producción de lágrimas sea adecuada y abordar cualquier afección subyacente que pueda afectar la producción de lágrimas y la salud ocular.