No hay evidencia que sugiera que besar a los bebés en las mejillas sea malo para ellos. Sin embargo, es importante tomar precauciones para evitar la propagación de gérmenes. Por ejemplo, los adultos deben lavarse bien las manos antes de besar a un bebé y evitar besarlo si está enfermo. También se debe evitar besar a los bebés en los labios, ya que esto puede aumentar el riesgo de transmitir ciertas infecciones, como el herpes.