¿Qué es una hemorragia gastrointestinal?
Una hemorragia gastrointestinal (GI) se refiere a una hemorragia que ocurre en el tracto digestivo, que incluye el esófago, el estómago, el intestino delgado y el intestino grueso (colon). Las hemorragias gastrointestinales a menudo se caracterizan por la presencia de sangre en las heces (hematoquecia), vómitos con sangre (hematemesis) o heces negras y alquitranadas (melena). Las hemorragias gastrointestinales superiores implican hemorragia del esófago, el estómago o el duodeno (primera parte del intestino delgado), mientras que las hemorragias gastrointestinales inferiores se refieren a hemorragias del intestino delgado, el colon o el recto. Las hemorragias gastrointestinales pueden variar de leves a graves y pueden ser causadas por diversas afecciones subyacentes, como úlceras, enfermedad diverticular, inflamación (colitis), anomalías vasculares o cáncer. También pueden ocurrir como resultado de ciertos medicamentos, traumatismos o infecciones. Los síntomas asociados con las hemorragias gastrointestinales pueden incluir dolor abdominal, náuseas, vómitos y debilidad. Es importante buscar atención médica de inmediato si experimenta síntomas que sugieran una hemorragia gastrointestinal, ya que puede ser un signo de una afección potencialmente grave. El diagnóstico y tratamiento de las hemorragias gastrointestinales puede implicar exámenes como endoscopia o colonoscopia, análisis de sangre y tratamientos para detener el sangrado y abordar la causa subyacente.