El albinismo no suele provocar ojos rojos. Las personas albinas generalmente tienen la piel muy pálida o blanca y el cabello muy blanco, rubio, pelirrojo pálido o dorado. El signo más notable del albinismo es la falta de pigmento (color) en los ojos. Por lo general, el iris de las personas albinas es de color azul claro, gris o marrón claro y puede tener un contenido de pigmento notablemente reducido. En determinadas condiciones de iluminación, el iris puede verse rojo o rosado, pero esto suele deberse al reflejo de la luz en la parte posterior del ojo. Los ojos rojos verdaderos no son una característica común del albinismo.