¿Por qué tienes amígdalas?
Las amígdalas ayudan a atrapar bacterias y virus que ingresan al cuerpo a través de la boca o la nariz. Cuando estos microorganismos quedan atrapados en las amígdalas, son destruidos por los glóbulos blancos. Esto ayuda a evitar que la infección se propague al resto del cuerpo.
Las amígdalas también producen anticuerpos, que son proteínas que ayudan a combatir las infecciones. Estos anticuerpos se liberan en la saliva y ayudan a proteger al cuerpo de futuras infecciones.
En la mayoría de las personas, las amígdalas se reducen de tamaño a medida que envejecen. Esto se debe a que el sistema inmunológico del cuerpo se vuelve más eficiente para combatir las infecciones y las amígdalas ya no son tan necesarias. Sin embargo, en algunas personas, las amígdalas pueden agrandarse y causar problemas como dificultad para respirar o tragar. En estos casos, puede ser necesaria una cirugía para extirpar las amígdalas.
Aquí hay algunas funciones adicionales de las amígdalas:
* Ayudan a producir saliva, que es esencial para la digestión y el habla.
* Ayudan a filtrar el polvo, el polen y otras partículas del aire que respiramos.
* Ayudan a proteger la laringe de daños.
* Desempeñan un papel en el desarrollo del sistema inmunológico.
En general, las amígdalas son una parte importante del sistema linfático y desempeñan un papel vital en la protección del cuerpo contra infecciones.