¿La rubéola IgG positiva tiene algún efecto en el recién nacido?

Sí, la rubéola IgG positiva en la madre puede tener un efecto en el recién nacido, especialmente si la madre se infecta con rubéola durante el embarazo. La rubéola es una infección viral contagiosa que puede causar síntomas leves en niños y adultos, pero puede tener consecuencias graves para las mujeres embarazadas y sus bebés por nacer.

Si una mujer embarazada se infecta con rubéola, el virus puede atravesar la placenta e infectar al feto en desarrollo. Esto puede provocar una afección llamada síndrome de rubéola congénita (SRC), que puede causar una variedad de defectos congénitos, que incluyen:

- Defectos cardíacos

- Problemas oculares (como cataratas)

- Pérdida de audición

- Discapacidades mentales

- Retraso del crecimiento

El riesgo de RSC es mayor si una mujer se infecta con rubéola en el primer trimestre del embarazo, pero aún puede ocurrir si se infecta más adelante en el embarazo.

Rubéola IgG positivo significa que la madre tiene anticuerpos contra la rubéola, lo que indica que ha sido infectada previamente con el virus y ahora es inmune. Esto significa que la madre misma no corre riesgo de desarrollar rubéola o SRC, pero aún podría transmitir el virus al feto si se infecta durante el embarazo.

Por este motivo, es importante que las mujeres embarazadas se vacunen contra la rubéola antes de quedar embarazadas. La vacuna contra la rubéola es segura y eficaz para prevenir la rubéola y el SRC. Si una mujer embarazada no es inmune a la rubéola, debe vacunarse lo antes posible para protegerla a ella y a su bebé del virus.