¿Qué es la ictericia fisiológica en los recién nacidos?

La ictericia fisiológica en los recién nacidos se refiere a una afección leve y temporal en la que la piel, los ojos y las membranas mucosas del bebé se ven amarillos debido a la acumulación de bilirrubina, un pigmento amarillo que se forma durante la descomposición de los glóbulos rojos. Es una afección común que generalmente se desarrolla dentro de los primeros días después del nacimiento y alcanza su punto máximo alrededor del tercer o cuarto día de vida.

Causas de ictericia fisiológica:

1. Aumento de la descomposición de los glóbulos rojos:los bebés recién nacidos tienen una mayor cantidad de glóbulos rojos que los adultos y, a medida que estas células se descomponen, se libera bilirrubina en el torrente sanguíneo.

2. Función hepática inmadura:el hígado es el principal responsable de procesar y eliminar la bilirrubina del cuerpo. En los recién nacidos, el hígado aún se está desarrollando y es posible que no sea completamente capaz de manejar el aumento de los niveles de bilirrubina.

3. Aumento de la circulación enterohepática:en algunos casos, la bilirrubina puede sufrir circulación enterohepática, donde se reabsorbe en los intestinos y recircula de regreso al hígado. Este proceso puede contribuir a la acumulación de bilirrubina en los recién nacidos.

Por lo general, la ictericia fisiológica se resuelve por sí sola dentro de las primeras 1 a 2 semanas a medida que el hígado del bebé madura y los niveles de bilirrubina disminuyen. Sin embargo, en ciertos casos, particularmente con niveles de bilirrubina excesivamente altos o si la ictericia aparece dentro de las primeras 24 horas después del nacimiento, puede ser necesario que el proveedor de atención médica investigue más a fondo para descartar otras causas o afecciones potenciales.

Por lo general, no se requiere tratamiento para la ictericia fisiológica, ya que generalmente no causa ningún daño. Sin embargo, si los niveles de bilirrubina aumentan demasiado, se puede utilizar fototerapia (exposición a una luz azul especial) para ayudar a descomponer la bilirrubina. Además, fomentar la lactancia materna frecuente o la alimentación con fórmula puede ayudar a facilitar la eliminación de bilirrubina a través de las deposiciones.

Es importante controlar periódicamente los niveles de bilirrubina durante el período neonatal para garantizar que la ictericia permanezca fisiológica y dentro de un rango seguro.