Sí, es posible dar a luz a un bebé en el agua, y este método de parto se está volviendo cada vez más popular ya que se cree que es una opción más cómoda y natural tanto para la madre como para el bebé. Los partos en el agua tienen lugar en una piscina especial de agua tibia y la madre puede permanecer en el agua durante el trabajo de parto y el alumbramiento. El calor del agua puede ayudar a reducir el dolor y brindar apoyo al cuerpo, y la flotabilidad del agua puede facilitar que la madre se mueva y se posicione. Además, los partos en el agua a menudo se asocian con partos más cortos y un menor riesgo de desgarros u otras lesiones para la madre.