¿Cuál debe ser la temperatura del agua de la piscina para los bebés?

La temperatura ideal del agua de la piscina para bebés es entre 90 y 94 grados Fahrenheit. Este rango de temperatura es lo suficientemente cálido como para mantener a los bebés cómodos y evitar que tengan demasiado frío, pero no tan caliente como para representar un riesgo para la seguridad.