Es importante tener en cuenta que cualquier cantidad de pérdida de sangre en un recién nacido debe tomarse en serio y debe ser evaluada por un profesional de la salud. La cantidad adecuada de pérdida de sangre variará según el peso, la edad y la salud general del recién nacido. En general, un recién nacido puede perder hasta el 1% de su volumen sanguíneo total antes de mostrar signos de anemia, lo que equivale aproximadamente a 10 mililitros de sangre para un recién nacido a término. Sin embargo, incluso pequeñas cantidades de pérdida de sangre pueden ser significativas en bebés prematuros o con bajo peso al nacer. Por lo tanto, siempre es importante consultar a un profesional de la salud si le preocupa cualquier sangrado o pérdida de sangre en un recién nacido.