Generalmente no. En la mayoría de las jurisdicciones, no se puede realizar una autopsia en contra de los deseos de los familiares del fallecido. Esto se debe a que el cuerpo de una persona fallecida se considera de su propiedad y sus familiares tienen derecho a tomar decisiones sobre lo que sucede con él. Sin embargo, existen algunas excepciones a esta regla. Por ejemplo, en algunos casos, la ley puede exigir una autopsia, como cuando una persona muere en circunstancias sospechosas. Además, algunos estados tienen leyes que permiten a los médicos forenses realizar autopsias sin el consentimiento de los familiares si creen que es de interés público.