Nunca es seguro consumir crack, especialmente durante el embarazo. Si está embarazada y le preocupa su consumo de sustancias, comuníquese con un proveedor de atención médica o un profesional de salud mental para obtener ayuda. Existen opciones de tratamiento seguras y efectivas disponibles para ayudarla a controlar su consumo de sustancias y proteger la salud de su bebé por nacer.