Pasas 7 meses seguidos sin período después de tener un bebé y tratar de concebir durante casi 1 año y medio. ¿Qué probabilidad hay de que se haya perdido tanto tiempo?
1. Amenorrea posparto: Después de dar a luz, es común que la mujer experimente un período de amenorrea (ausencia de menstruación) debido a los cambios hormonales y la lactancia. Esto puede durar desde unas pocas semanas hasta varios meses.
2. Lactancia materna: La lactancia materna puede suprimir la ovulación y la menstruación en algunas mujeres. Esto se conoce como amenorrea de lactancia y es más común en mujeres que están amamantando exclusivamente y aún no han introducido alimentos sólidos a su bebé.
3. Amenorrea hipotalámica: El estrés, el ejercicio excesivo, el bajo peso corporal y ciertas afecciones médicas pueden alterar el funcionamiento normal del hipotálamo, una parte del cerebro involucrada en la regulación de las hormonas y la ovulación. Esto puede provocar que se pierdan períodos o que sean irregulares.
4. Síndrome de ovario poliquístico (SOP): El síndrome de ovario poliquístico es un trastorno hormonal que afecta la ovulación y puede provocar períodos irregulares o ausentes. Se caracteriza por la presencia de múltiples quistes pequeños en los ovarios, niveles elevados de ciertas hormonas (como los andrógenos) y, a menudo, se asocia con síntomas como acné, vello facial o corporal excesivo y aumento de peso.
5. Problemas de tiroides: Los trastornos de la tiroides, como el hipotiroidismo (tiroides hipoactiva) o el hipertiroidismo (tiroidea hiperactiva), pueden interferir con los ciclos menstruales y provocar períodos irregulares o faltantes.
6. Embarazo: Es importante descartar la posibilidad de embarazo si ha perdido su período durante un período prolongado. Durante la lactancia, es posible quedar embarazada incluso sin tener un ciclo menstrual regular.
Si le preocupa la falta de períodos y la dificultad para concebir, se recomienda consultar a un profesional de la salud para una evaluación. Pueden realizar pruebas relevantes, como análisis de sangre, pruebas hormonales o estudios de imágenes, para determinar la causa subyacente y recomendar el tratamiento o las intervenciones adecuadas para ayudarla a concebir.