Tuviste una interrupción a las 10 semanas, esto se hizo hace dos meses y después te sentiste bien, pero en los últimos días tu anhelo de tener un bebé se ha vuelto cada vez más fuerte, ¿por qué me siento así?

1. Cambios hormonales: Después de una interrupción del embarazo, su cuerpo pasa por un cambio hormonal significativo. Los niveles de hormonas como el estrógeno y la progesterona, que estaban elevados durante el embarazo, disminuyen rápidamente después del procedimiento. Esta caída repentina de hormonas puede provocar cambios de humor, ansiedad y depresión, así como un fuerte anhelo por el bebé que perdió.

2. Dolor y pérdida: Interrumpir un embarazo puede ser una experiencia traumática y los sentimientos de pena y pérdida que siguen son normales y válidos. Es posible que sienta una sensación de vacío, tristeza y añoranza por el bebé que tuvo que dejar ir. Estos sentimientos pueden ser particularmente intensos alrededor de la fecha prevista de parto o en aniversarios relacionados con la terminación.

3. Emociones no resueltas: Si no tuviste la oportunidad de procesar y lamentar completamente la pérdida de tu bebé, el anhelo que sientes ahora podría ser una señal de emociones no resueltas. Hablar con un terapeuta o consejero que se especialice en la pérdida del embarazo puede ayudarla a superar estas emociones y encontrar formas de afrontarlas.

4. Falta de cierre: No tener un recordatorio físico del embarazo, como una panza o un niño que cuidar, puede hacer que sea más difícil seguir adelante y dejar de lado el anhelo. Encontrar formas de crear una sensación de cierre, como escribirle una carta a su bebé, plantar un árbol en su memoria o realizar un servicio conmemorativo, puede ayudarle a sanar y seguir adelante.

5. Factores sociales y culturales: Las actitudes culturales y sociales que rodean el aborto y la pérdida del embarazo también pueden contribuir a los sentimientos de anhelo y tristeza que estás experimentando. Es posible que se sienta presionado a seguir adelante rápidamente o sentirse culpable por su decisión, lo que puede dificultar el procesamiento y el duelo de su pérdida.

Es importante recordar que sus sentimientos son válidos y normales, y que no existe una forma correcta o incorrecta de afrontar el duelo. Permítase sentir las emociones que surjan y no dude en buscar el apoyo de un amigo, familiar, terapeuta o grupo de apoyo de confianza. El tiempo y el apoyo le ayudarán a sanar y encontrar la paz con su decisión.