Generalmente se recomienda esperar al menos de 2 a 4 semanas después del parto antes de bañar a la madre Shitzu. Esto le da tiempo para recuperarse por completo y recuperar sus fuerzas. Durante este tiempo, puedes utilizar un paño húmedo para limpiarla y mantenerla limpia. Asegúrese de evitar que el agua se acerque a sus pezones, ya que esto podría provocar una infección. Cuando la bañes, usa agua tibia y un champú suave diseñado para perros. Sea amable y evite frotarlo con demasiada fuerza, ya que esto podría causarle molestias. Enjuágala bien y sécala bien con una toalla.