¿Cuáles son los síntomas de un posible parto de nalgas?
1. La cabeza del bebé no está encajada en la pelvis. La cabeza del bebé debe estar encajada en la pelvis a las 36 semanas de embarazo. Si no es así, es posible que el bebé esté en posición de nalgas.
2. La madre siente los pies o el trasero del bebé en la parte baja de su abdomen. Esta es una señal segura de que el bebé está en posición de nalgas.
3. El vientre de la madre tiene una forma inusual. Si el bebé está en posición de nalgas, el vientre de la madre puede parecer más alargado o puntiagudo de lo habitual.
4. La madre siente dolor en la zona lumbar o en la pelvis. Este dolor puede ser causado por la presión de la cabeza del bebé sobre los nervios de la madre.
5. La madre tiene antecedentes de partos de nalgas. Si una madre ha tenido un parto de nalgas anteriormente, es más probable que tenga otro.
Si experimenta alguno de estos síntomas, es importante que consulte a su médico o partera de inmediato. Podrán confirmar si el bebé está o no en posición de nalgas y recomendarán el mejor curso de acción.