El comportamiento de Sam, caracterizado por una falta de empatía, agresión, desprecio por las normas sociales y desprecio por los derechos de los demás, parece alinearse con los rasgos del trastorno de personalidad antisocial (ASPD). Las personas con ASPD a menudo muestran un patrón de ignorar o violar los derechos de los demás sin remordimiento ni culpa. También pueden tener antecedentes de agresión y otros comportamientos antisociales,