Deficiencia de B12 en niños:lo que debe saber

La vitamina B12, también conocida como cobalamina, es un nutriente esencial que participa en varias funciones corporales importantes, como la formación de glóbulos rojos, la función nerviosa y la síntesis de ADN. Si bien la deficiencia de vitamina B12 es relativamente poco común en los niños, puede ocurrir y tener importantes consecuencias para la salud.

Causas de la deficiencia de B12 en niños

Deficiencia dietética:los niños que siguen una dieta vegana estricta sin los suplementos adecuados corren el riesgo de sufrir una deficiencia de vitamina B12, ya que esta vitamina se encuentra principalmente en productos animales, como la carne, el pescado, los huevos y los lácteos.

Malabsorción intestinal:ciertas afecciones médicas que afectan la absorción de nutrientes en los intestinos, como la enfermedad celíaca, la enfermedad de Crohn o el crecimiento excesivo de bacterias, pueden interferir con la absorción de vitamina B12.

Gastritis autoinmune:esta es una afección en la que el cuerpo produce anticuerpos que atacan las células del estómago responsables de producir una sustancia llamada factor intrínseco. El factor intrínseco es esencial para la absorción de la vitamina B12.

Anemia perniciosa:una enfermedad autoinmune en la que el cuerpo ataca las células del estómago que producen el factor intrínseco.

Trastornos genéticos raros:los trastornos metabólicos hereditarios, como el síndrome de Imerslund-Gräsbeck y la deficiencia de transcobalamina II, pueden alterar la absorción, el transporte o la utilización de la vitamina B12.

Síntomas de deficiencia de B12 en niños

Los síntomas de la deficiencia de vitamina B12 pueden variar según la gravedad de la deficiencia y pueden desarrollarse gradualmente con el tiempo. Los síntomas comunes incluyen:

Piel pálida o amarillenta (palidez)

Fatiga o debilidad

Dificultad para respirar o frecuencia cardíaca rápida (debido a anemia)

Entumecimiento u hormigueo en manos y pies (neuropatía periférica)

Pérdida de apetito o pérdida de peso.

Dificultad para concentrarse o deterioro de la memoria.

Crecimiento deficiente o pubertad retrasada.

Irritabilidad o cambios de comportamiento.

Inflamación de la lengua (glositis)

Infecciones recurrentes

Diagnóstico de deficiencia de B12

Si un niño presenta síntomas que sugieren una deficiencia de vitamina B12, un profesional de la salud puede recomendar varias pruebas para confirmar el diagnóstico, como:

Análisis de sangre:los análisis de sangre pueden medir los niveles de vitamina B12 y evaluar el tamaño de los glóbulos rojos, que pueden ser anormalmente grandes en caso de deficiencia de B12.

Niveles de ácido metilmalónico y homocisteína:son sustancias que se acumulan en la sangre cuando hay deficiencia de vitamina B12 y niveles elevados pueden indicar una deficiencia de B12.

Prueba de Schilling:esta prueba se utiliza para evaluar la absorción de vitamina B12 en el cuerpo.

Tratamiento para la deficiencia de B12

El tratamiento para la deficiencia de vitamina B12 generalmente implica abordar la causa subyacente y reponer las reservas de vitamina B12 en el cuerpo. Dependiendo de la gravedad de la deficiencia, las opciones de tratamiento pueden incluir:

Suplementos orales de vitamina B12:En casos de deficiencia leve a moderada, los suplementos orales pueden ser suficientes.

Inyecciones de vitamina B12:en casos de deficiencia grave o en casos en los que los suplementos orales no se absorben bien, pueden ser necesarias inyecciones de vitamina B12.

Cambios en la dieta:Para los niños que siguen una dieta vegana, incorporar alimentos fortificados o tomar un suplemento de vitamina B12 es fundamental para prevenir la deficiencia.

Seguimiento y Monitoreo

Es importante controlar periódicamente los niveles de vitamina B12 y la respuesta clínica al tratamiento para garantizar que la deficiencia se aborda adecuadamente y evaluar cualquier posible complicación o causa subyacente.

Prevención de la deficiencia de B12

Para los niños que siguen una dieta vegana, un suplemento de vitamina B12 o el consumo regular de alimentos enriquecidos pueden ayudar a prevenir la deficiencia de B12. Los alimentos enriquecidos pueden incluir ciertos cereales, leches de origen vegetal y levadura nutricional.

Además, la identificación y el tratamiento tempranos de cualquier afección médica subyacente que afecte la absorción de nutrientes puede ayudar a prevenir o controlar la deficiencia de B12.

Si sospecha que su hijo puede tener deficiencia de vitamina B12 o le preocupa satisfacer sus necesidades de vitamina B12, es recomendable consultar a un profesional de la salud para una evaluación, un diagnóstico y una orientación adecuados sobre las recomendaciones dietéticas o de suplementos adecuadas.