¿Hubo suficientes médicos en la Primera Guerra Mundial?
La escasez de médicos fue particularmente grave en los primeros días de la guerra. En agosto de 1914, por ejemplo, el ejército británico tenía sólo 2.500 médicos para más de 1 millón de soldados. Esto significaba que sólo había un médico por cada 400 soldados. La situación fue similar en otros países, como Francia y Alemania.
La escasez de médicos tuvo un impacto significativo en la calidad de la atención que se brindaba a los heridos. En muchos casos, los soldados heridos no recibieron tratamiento hasta horas o incluso días después de haber sido heridos. Este retraso a menudo provocaba infección y muerte.
La escasez de médicos también hizo difícil satisfacer la demanda de suministros médicos. En algunos casos, simplemente no había suficientes suministros disponibles para tratar a los heridos. Esto provocó muchas muertes innecesarias.
La escasez de médicos en la Primera Guerra Mundial fue un problema grave que tuvo un impacto significativo en la guerra. La falta de personal médico calificado provocó sufrimiento y muerte innecesarios.