Sí, el trastorno obsesivo compulsivo (TOC) puede provocar problemas de ira. Las personas con TOC pueden experimentar ansiedad y frustración intensas cuando no pueden controlar sus pensamientos o compulsiones. Esto puede provocar arrebatos de ira, irritabilidad y agresión. Además, las personas con TOC también pueden sentirse avergonzadas o avergonzadas por su condición, lo que puede contribuir aún más a los problemas de ira.