¿Cómo se cuida un caballo con EPOC?
- Mantener al caballo en un ambiente limpio y libre de polvo.
- Utilice ropa de cama como paja o virutas que no generen polvo.
- Evite el uso de heno o paja que tenga moho o polvo.
- Utilice un humidificador en el establo o establo del caballo para aumentar el contenido de humedad del aire.
- Evitar exponer al caballo a cambios bruscos de temperatura o humedad.
2. Proporcionar una dieta adecuada
- Alimente al caballo con una dieta rica en fibra y baja en almidón y azúcar.
- El heno de hierba de buena calidad es el mejor forraje para los caballos con EPOC.
- El heno de alfalfa se puede alimentar en pequeñas cantidades, pero no debe ser la principal fuente de forraje.
- Evite alimentar con maíz, avena y otros cereales con alto contenido de almidón.
- Alimente al caballo con comidas pequeñas a lo largo del día en lugar de una comida grande.
- Esto ayudará a reducir la cantidad de gases y polvo en el sistema digestivo del caballo.
3. Ejercita al caballo regularmente
- El ejercicio es fundamental para los caballos con EPOC.
- El ejercicio ayuda a mejorar la función respiratoria y el estado físico general del caballo.
- Comience con caminatas cortas y lentas y aumente gradualmente la intensidad y duración del ejercicio a medida que mejore la condición del caballo.
- Evite ejercitar al caballo en condiciones de polvo o humedad.
4. Vigilar el estado del caballo
- Controle periódicamente la frecuencia respiratoria, la frecuencia cardíaca y la temperatura del caballo.
- Además, controle el apetito, el peso y el comportamiento del caballo.
- Cualquier cambio en el estado del caballo debe comunicarse inmediatamente al veterinario.
5. Tratar los brotes
-La EPOC se puede controlar, pero no se puede curar. Los brotes pueden ocurrir en cualquier momento, pero son más comunes durante períodos de estrés, como cambios de clima, ejercicio o viajes.
- Si se produce un brote, es importante tratarlo rápidamente para evitar que la afección empeore. El tratamiento puede incluir:
- Administrar broncodilatadores para relajar las vías respiratorias.
- Administrar corticosteroides para reducir la inflamación.
- Proporcionar oxigenoterapia.
- Hospitalizar al caballo si es necesario.