¿Qué pasa con los órganos y el cerebro después de una autopsia?

Órganos:

Después de una autopsia, los órganos internos generalmente se extraen del cuerpo para su posterior examen y análisis. Una vez tomadas las muestras o mediciones necesarias, los órganos suelen descartarse si no tienen importancia diagnóstica o si no cumplen los deseos de la familia. Dependiendo de las leyes y regulaciones locales, los órganos pueden eliminarse o incinerarse después del procedimiento de autopsia.

Cerebro:

En determinados casos, como investigaciones médico-legales o circunstancias relacionadas con enfermedades neurológicas, puede ser necesario examinar el cerebro durante una autopsia. Después de un examen exhaustivo, el cerebro normalmente se elimina o se conserva de forma adecuada. Es fundamental consultar las normas y reglamentos legales pertinentes que regulan el manejo de tejidos humanos y la disposición de muestras post mortem.