¿Cómo se realizaba la cirugía en el siglo XIX?

A principios del siglo XIX, la cirugía era un procedimiento peligroso y, a menudo, mortal. No hubo anestesia, por lo que los pacientes estaban completamente conscientes durante la cirugía. Los cirujanos utilizaban instrumentos toscos y tenían conocimientos limitados de anatomía, lo que provocaba muchas complicaciones.

Aquí hay una descripción general de cómo se realizaba la cirugía en el siglo XIX:

* Cuidados preoperatorios: Antes de la cirugía, a los pacientes se les administraba a menudo un laxante para limpiar los intestinos y un sedante para ayudarles a relajarse. No les dieron anestesia, por lo que estuvieron completamente conscientes durante el procedimiento.

* Instrumentos quirúrgicos: Los instrumentos quirúrgicos utilizados en el siglo XIX eran toscos y básicos. Incluían bisturís, sierras, fórceps y hemostáticos.

* Técnica quirúrgica: Los cirujanos harían una gran incisión en la piel y luego usarían sus instrumentos para extirpar el tejido enfermo. A menudo usaban un cauterio para detener el sangrado.

* Cuidados postoperatorios: Después de la cirugía, los pacientes a menudo eran dejados en la misma habitación que otros pacientes que se estaban recuperando de la cirugía. Se les proporcionó poco analgésico y corrían riesgo de infección.

La tasa de mortalidad por cirugía era alta en el siglo XIX. Se estima que hasta el 50% de los pacientes fallecieron por complicaciones de la cirugía.

Algunas de las complicaciones más comunes de la cirugía en el siglo XIX incluyeron:

* Sangrado: Los cirujanos no tenían una buena manera de detener el sangrado, por lo que los pacientes a menudo morían por pérdida de sangre.

* Infección: En el siglo XIX no había antibióticos, por lo que los pacientes a menudo se infectaban después de la cirugía.

* Dolor: Los pacientes no recibieron anestesia durante la cirugía, por lo que experimentaron un dolor insoportable.

* Choque: El trauma de la cirugía podría provocar que los pacientes entren en shock, lo que podría provocar la muerte.

* Daño a órganos: En ocasiones, los cirujanos dañan órganos accidentalmente durante la cirugía.

A pesar de los riesgos, la cirugía era a menudo la única opción para pacientes con afecciones médicas graves. En el siglo XIX, la cirugía comenzó a evolucionar y mejorar, y finalmente se convirtió en un procedimiento más seguro y eficaz.